La Justicia reveló este martes que la saga de homicidios ocurridos en la ciudad de Rosario, a modo de represalia por el endurecimiento en las condiciones de detención de los reclusos santafesinos, fueron ordenados desde prisión por “presos de alto perfil” y que los ejecutores fueron menores de 15 años que cobraron al menos de $400.000.

Los datos fueron ventilados por los fiscales del caso Patricio Saldutti, Franco Carbone y Adrián Spelta que en una audiencia realizada en el Centro de Justicia Penal imputaron a las seis personas que se encuentran detenidas por los crímenes y balaceras que sacudieron a la ciudad del sur provincial.

Entre ellos, se encuentran los asesinatos a sangre fría de los taxistas Héctor Figueroa y Diego Celentano, el chofer de la línea K Marcos Daloia y el playero de la estación de servicio Bruno Bussanich.

Sobre este último homicidio, ocurrido el 9 de marzo, los fiscales indicaron que el menor que fue detenido y luego liberado (ya que tiene 15 años) previo al crimen fue hasta calle Misiones al 2200 en un Uber en donde lo esperaba un joven que cumplía prisión domiciliaria y habría sido quien le entregó el arma de fuego y la nota escrita.

Según la imputación de la Fiscalía, ambos recibieron una videollamada con instrucciones desde el Servicio Penitenciario Federal. Con posterioridad se dio el crimen del playero y la huida del menor a bordo de un Fiat Duna que lo aguardaba en inmediaciones de la estación de servicio. Dicho vehículo, revelaron los fiscales, había sido robado el 1 de diciembre pasado en Pueyrredón al 1500 de Rosario y luego lo utilizaron para cometer el crimen y con posterioridad incendiarlo.

La causa estableció además que Chuky Monedita, un preso alojado en la cárcel de Piñero desde el 2015, fue quien encargó los crímenes de los taxistas Héctor Figueroa y Diego Celentano. El reclutamiento habría estado a cargo de la pareja de Monedita, una mujer llamada Brenda Pared, que se encargó de conseguir a los menores no punibles para cometer la saga de homicidios que sembró terror en Rosario.

En la audiencia, el fiscal Salduti explicó además que el presunto autor del crimen del colectivero Marcos Daloia, muerto mientras prestaba servicio en un ómnibus, se encuentra actualmente prófugo, como también su cómplice.