El DT de Unión, Cristian González, volvió a insistir en jerarquizar el plantel para el próximo año. «No podemos esperar hasta diciembre, hay que invertir», tiró.
Como suele suceder, el DT de Unión, Cristian González, no se guardó nada y nuevamente focalizó el futuro, apuntando a los refuerzos que pretende y en caso de no suceder, dar un paso al costado y no renovar el vínculo.
En el arranque dijo que «perdimos el partido por detalles, en un momento el penal de ellos, sentimos el gol del final del primer tiempo, decidimos cambiar y el equipo estuvo a la altura de lo que se jugaba. No les puede recriminar nada, el que lo haga no tiene la camiseta de Unión. Perdieron todos los rivales que estaban ahí, nos supera en presupuesto el equipo que nos ganó, el equipo lo empujó, generó situaciones claras que hasta pudimos empatar, hay que seguir».
Ya en su segunda respuesta se puso a detallar cómo puede llegar a ser su renovación, al decir que «no está asegurada mi continuidad en Unión, lo vengo diciendo hace mucho tiempo, estoy en contacto con el presidente, queda a la vista que nosotros con el plantel que tenemos, que se entrega a morir, más allá de errores que cometen dos equipos, con dos o tres detalles nos hicieron los goles, está en la jerarquía del rival, hay que hablar muy profundo con el presidente para ajustar cosas y espero que lo entienda. No va por una cuestión de mi contrato en sí, hay que darse cuenta que hay que mejorar el plantel, que vengan jugadores de jerarquía. Es un equipo que pelea, se entrega, lucha, se que vamos a lograr el objetivo».
Y después, amplió: «De no entenderlo, obvio que me voy a ir, mi cuerpo técnico y los jugadores están conmigo, ajustaremos cosas que pienso son beneficiosas para el club, no solamente para el plantel profesional, sino para todas las áreas, no es un capricho, es sentido común y que todos nos pongamos la camiseta de Unión, pensando en poder crecer como club y equipo, si no están dadas las circunstancias para que no se cumpla lo que pido, seguramente no seguiré».
El repaso de lo sucedido desde su arribo
«Al presidente lo conozco hace un año y medio, es una situación que de una vez por todas, del sentido común, de competir con un rival diez veces más caro que termina haciendo tiempo, el equipo tomando riesgos, cambiando el sistema, los jugadores van para adelante, se fueron aplaudidos, esos detalles nos hicieron perder el partido, hay que interpretar situaciones de juego, que va a aprender, ojalá que lo entienda de una vez. Yo no me entrego y creo que se puede, hay que ganar un partido de lo que queda, Platense es un rival directo».
Después se metió de nuevo en el partido, al expresar que «uno busca variantes de todo tipo, los jugadores se saben adaptar a los distintos sistemas, el cambiar situaciones nos hace tomar riesgos, el equipo siempre insistió, hay que seguir ajustando, no nos puede suceder, me da más fuerzas de creer que vamos a poder, el que no tiene la camiseta de Unión que no venga. Cumplimos un año de defender la categoría, comiendo mierda, el equipo está en Copa Sudamericana, estos pibes hacen cosas bien, los grandes empujan contra todo lo que sean. Necesitamos gente que empuje para cumplir el objetivo».
Kily insistió con el «hambre de gloria»
«Acá hay que ver que no es un gasto, es formador y vendedor, siempre vendió chicos del club, ingresa dinero, hay que ponerlo para invertir en el plantel, instalaciones, juveniles, fútbol femenino, empleados, no me como el personaje, el día que perjudique a Unión me voy a Rosario. Vi un cambio en este año y medio, y sale de la relajación, hay que tener hambre de gloria, el fútbol te moviliza, si no lo sentís no perteneces. Hay que invertir, si potenciamos a los juveniles, hay jugadores que no quería venir y hoy quieren venir, porque Unión tiene una idea clara, arrancamos descendidos, todo lo que viví en el pasado lo tengo presente. Cambiamos la mentalidad, el presidente se tiene que hacer cargo, hay que hacer un esfuerzo».
Para luego, acotar: «Hoy tenes al otro equipo de la ciudad en otra categoría, hay que aprovecharlo, el fútbol son momentos, nos quedan tres partidos, en ese transcurrir hay que empezar a buscar jugadores, si el entrenador sigue o no, confío en que lo va a entender. Tengo hambre de que se puede, en Argentina cualquiera le puede ganar a cualquiera».
En la parte final, recalcó que desea acciones por sobre promesas, al sentenciar: «No quiero ver más, les digo a mis jugadores, hay que hacer, se acaba el tiempo en lo deportivo, se acaban las posibilidades, Unión con este equipo queremos entrar en una copa internacional, ahora queremos entrenar, estamos fuertes, son golpes que hay que asimilar, ajustar más, eso a nivel de Comisión Directiva para mejorar, lo trato de transmitir. Me dicen muchos que no lo voy a lograr, se que me va a entender, ojalá Dios quiera puedo continuar en el club, si pasa se movieron las tierras para mejorar».
Gentileza UNO Santa Fe