El Club San Isidro de barrio Candioti Norte de laciudad de Santa Fe celebró su tan esperada reinauguración este sábado, luego de pasar por un proceso de recuperación que le dio nueva vida.

Personas de todas las edades se reunieron, en la sede de Güemes al 4500, para disfrutar de una jornada cargada de actividades, entre las cuales destacaron clases de zumba, juegos para los más chicos y un espacio gastronómico con los tradicionales choripanes.

Marcela Martínez, nueva presidenta del club, compartió su alegría por el logro alcanzado: «Hace más de tres años comenzamos el proceso de normalización del club, que estaba cerrado y sin comisión directiva. Hoy, con el apoyo de los vecinos, logramos devolverle la vida», expresó con emoción.

A través de una intervención legal y el compromiso de los miembros de la comunidad, el club fue normalizado, permitiendo que se eligiera una nueva comisión directiva y comenzaran a implementarse actividades para todos los públicos. “Este es un espacio de contención, de encuentro y de participación para toda la comunidad”, añadió Martínez.

Los asistentes pudieron disfrutar de una variedad de actividades, desde clases de zumba, a cargo de una profesora local, hasta un pelotero para los niños y una mini feria de emprendedores del barrio. El club también ofreció un espacio para los vecinos con stands de emprendimientos locales y una merienda gratuita para los más chicos. En un ambiente de alegría y solidaridad, los vecinos destacaron la importancia de recuperar un lugar como el Club San Isidro. «Es un lugar de encuentro que le da vida al barrio, especialmente en tiempos difíciles», afirmó uno de los vecinos presentes.

El club, que cuenta con una historia de más de 80 años, se propone no solo como un espacio deportivo, sino también cultural y social. A las actividades de deportes como fútbol y hockey, se sumarán nuevos proyectos como una biblioteca y apoyo escolar, en colaboración con instituciones locales. Sin dudas, este 29 de marzo quedará marcado en la retina de todos los vecinos del barrio que vieron renacer al club San Isidro.

Gentileza Aire Digital