22 de septiembre de 2023

Santa Fe 24 Horas

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Bajante histórica del Paraná afectaría el suministro de agua potable y convocan a buzos

La empresa Aguas Santafesinas incorporó un equipo de buceo de última generación para el mantenimiento de las tomas de agua y así enfrentar la bajante histórica del río Paraná. Según las perspectivas que brindan los especialistas, el caudal del río no se recuperará en todo el verano y recién se podría esperar un leve repunte para el otoño.

El vocero de la compañía, Guillermo Lanfranco, remarcó que “se trata de una unidad de las más sofisticadas que hay en el mercado. Es de origen estadounidense y permite la inmersión de dos buzos al mismo tiempo e intercomunicados entre ellos al mismo tiempo”.

Lafranco indicó que tienen tubos de oxígeno que dan autonomía. “Estos equipos nos habilitan a mejorar las tareas que hay que hacer en forma regular para mantener operativas las tomas en las siete plantas que hay sobre el río Paraná entre Reconquista y Rosario”.

También expresó que la histórica bajante del río que se verifica desde hace varios meses provoca “un taponamiento de las rejas de las tomas con residuos que pueden obstruir el mecanismo y afectar el rendimiento de las bombas. Con estos equipos tenemos mayor capacidad operativa para afrontar esta situación”.

El vocero de la empresa sostuvo que para que trabajen los buzos es necesario detener las tomas de agua. “Esta es una mejora operativa, pero en algún punto, especialmente en las madrugadas de domingo cuando hay menos consumo de agua, hay que detener un par de horas las tomas para realizar estas tareas. Por lo general hay muy poca afectación del servicio en esos horarios y días”, agregó.

Niveles por debajo de los históricos

Lanfranco admitió que el caudal del río no se recuperará durante este verano. “Según los pronósticos de los organismos que analizan los ríos de la cuenca Del Plata, por lo menos hasta el otoño estaremos en niveles por debajo de los históricos”.

Además señaló que la altura del río es de un metro en la actualidad cuando debería estar en dos y medio.

“Eso provoca un esfuerzo mayor de los equipos que extraen el agua, y por lo tanto los riesgos de averías son mayores. Por otro lado, hay una cuestión asociada al marco de la pandemia. Mucha gente decidió quedarse en su casa. Eso hizo que se vendieran una mayor cantidad de piletas de lona que tienen una capacidad promedio de 3 mil litros”, agregó.

Piden responsabilidad

“Si ese consumo se acentúa como algo no asociado a lo esencial, nos preocupa porque puede agrandar la demanda y se podría afectar las presiones en barrios. Por eso pedimos que quien tenga esta pileta haga un uso responsable y solidario del agua. Sugerimos medidas como agregar gotas de cloro o lavandina para la limpieza. Tapar la pileta para evitar que se ensucie el agua con facilidad, y si se entra y sale poner un balde o fuentón para el lavado de pies, y evitar que haya una manguera todo el tiempo poniendo agua limpia”, solicitó en el final de la entrevista.

Foto gentileza El Ciudadano Web