Tras el temporal, el municipio activó cuadrillas, estaciones de bombeo y reservorios para minimizar los anegamientos y proteger a los vecinos de posibles daños en viviendas.
Este martes, un intenso temporal de lluvia afectó la ciudad de Santa Fe, generando acumulación de agua en distintos sectores y llevando a las autoridades a poner en marcha los protocolos de emergencia.
Operativos municipales
En este contexto, el intendente de Santa Fe, Juan Pablo Poletti, presentó un panorama sobre la respuesta de la ciudad frente a las lluvias intensas: “Cada día de lluvia nos ponemos en el lugar del vecino y buscamos soluciones. Comparado con la lluvia de mayo, la ciudad respondió mucho mejor. Pudimos prevenir muchas contingencias y limpiar los puntos críticos”, señaló.
Poletti explicó que la limpieza de alcantarillas permitió un mejor escurrimiento del agua, y destacó la importancia de que los vecinos no arrojen basura en las calles. “Sabemos los puntos críticos y seguimos trabajando para que el agua no ingrese a las viviendas”, agregó, mencionando zonas como la cancha de Colón, Peñaloza y Gorriti, donde se registraron anegamientos pero sin daños a las viviendas.
Por su parte, Eduardo Rudi, secretario de Desarrollo Urbano y Gestión Hídrica, detalló el operativo: “Hay 12 cuadrillas trabajando, con maquinaria especializada y grúas para resolver obstrucciones a medida que el agua corre. Es un sistema dinámico y complejo”.

Asimismo, informó que el municipio invierte 1.400 millones de pesos este trimestre en limpieza de canales y reservorios, mientras que la provincia aporta bombas de reserva para garantizar el funcionamiento de las estaciones.
Estaciones de bombeo
Rudi explicó cómo funcionan las estaciones de bombeo del oeste de la ciudad: siete en total, cuatro de ellas impulsan el agua mecánicamente por la cota del terreno, y un sistema dual permite abrir compuertas cuando el río está bajo y usar bombas cuando es necesario. También indicó que los reservorios funcionan como amortiguadores del agua y que toda la ciudad cuenta con 64 puntos de bombeo.
Ante el pronóstico de más lluvias, el secretario recomendó a los vecinos “retener los residuos hasta que se indique cuándo retirarlos y tener cuidado al circular por calles mojadas”. Consultado sobre los asentamientos en la zona oeste, explicó que los reservorios y defensas son esenciales para mitigar riesgos, pero la cooperación de los vecinos sigue siendo clave.
Finalmente, ambos funcionarios coincidieron en que, pese a la intensidad de las precipitaciones, el sistema de bombeo y reservorios permitió que el agua corriera rápidamente sin afectar viviendas. Las bombas de reserva no fueron necesarias, aunque se activó una motobomba que iguala el caudal de cuatro bombas eléctricas, garantizando la operatividad del sistema.
Gentileza El Litoral